CAPERUCITA
CAPERUCITA
Frente a mí, el móvil;
la duda de llamar o no llamar.
Sin saber qué hacer,
sólo atino a recordar
tu imagen en una canción.
Recuerdo perdido, de tu cabello bruñido.
Humo al cielo de tu aliento divino.
Perdido en un bucle sin sentido,
que se alza desde el mismo abismo,
pasando por los sentimientos reprimidos,
cabalgando por lugares escondidos.
Palabras que por calladas gritan.
Esperando una respuesta de tus latidos.
Tu corazón egoísta guarda silencio,
mientras las nubes lloran granizo
y tus ojos parpadean ocasos golondrinos.
Suena el sonido, revolotea dentro de mi sino.
Es una llamada, eres tú, esperanza perdida.
Eres tú, mujer. Mitad fuego, mitad hielo.
Que derrites mi vida, que congelas mi sueño.
Que con tu aliento el mundo permanece quieto
Eres tú mujer, quien me tiene asido.
Quien, en sus manos, me lleva en vilo.
Graciosa gacela, que por fin has llamado.
Sin ti soy un pobre lobo perdido.
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